Costa Oeste

Después de 10 años sin visitar este país, tenía ganas de volver. Pero esta vez, me apetecía conocer la otra costa del país.

Por lo que había leido en blogs, y por lo que la gente me había contado, tenía pinta de que éste iba a ser un viaje muy especial, y mucho más aún si lo compartía con mi pareja.

Es un viaje que ha superado mis expectativas. Empezando por la preciosa ciudad San Francisco, nos adentramos en el inmenso Yosemite, dónde se respiraba una paz que inundaba tu cuerpo de energia, siguiendo por el Parque Nacional de Secuoyas, dónde los rayos atravesaban los pinos nevados y lo convertían en un paisaje mágico.

Más adelante, nos aproximábamos al desierto de Death Valley, lo formaban paisajes únicos y diferentes, y de repente, sin darnos cuenta, aparecíamos en la ostentosa ciudad de Las Vegas. En el momento en el que te sientes abrumado por ella, decides escapar y llegas a tu próximo destino, un rancho de Utah. Ya estás listo para ver Bryce Canyon, y es entonces, cuando una vez más, el viaje te vuelve a sorprender.

Conduces a través de sus pueblos y te adentras en Arizona, Antelope Canyon. En este lugar te quedas sorprendido de la fuerza y lo maravillosa que es la naturaleza. Sigues conduciendo y te ves en la inmensidad del Gran Cañon. Cuando te quieres dar cuenta estás cogiendo un vuelo a San Diego, y en menos de una hora, el paisaje y el ambiente del lugar han cambiado por completo.

Pasamos por el ritmo de San Diego, movido por la brisa del mar. Seguimos por sus pueblos costeros llenos de surf hasta que llegamos a Los Ángeles. Qué decir de esta ciudad, tantos contrastes en tan poco espacio.

Esto es sólo una mínima parte de lo que sentí. Cada noche me metía en la cama pensando, es imposible que mañana me vaya a sorprender más, y aún así, lo hacía.

Cosas importantes para viajar a Estados Unidos:

  • Visado: Para viajar a Estados Unidos con una estancia inferior a 90 días y un billete de ida y vuelta podéis viajar utilizando el Sistema Electrónico para Autorización de Viaje (ESTA). Podéis obtenerlo en la página oficial.
  • Pasaporte: El pasaporte debe tener una validez mínima de 6 meses. Aseguraos de este detalle importante con antelación suficiente por si tuvieseis que renovarlo
  • Seguro médico: Os recomiendo seguros Iati
  • Moneda: La moneda que se usa en Estados Unidos es el dolar americano. 1€ = 1,10 $. Os dejo la página donde podéis ver el cambio en tiempo real
  • Roaming: Depende de la compañía telefónica que tengáis, podéis utilizar vuestro teléfono como en España. Yo tenía Vodafone y pude utilizar el móvil en todo momento
  • Seguridad: Por lo general me ha parecido un país muy seguro, evitando alguna zona de las ciudades, que simplemente es mejor no visitar… lo iréis viendo a lo largo de este post
  • Alquiler de coche: Os recomiendo alquilar coche 100%. Es comodísimo y se va super bien a cualquier lado. En ningún momento tuvimos problemas
  • Ahorrar: Este viaje ha sido muchísimo más caro de lo que pensábamos. Los sitios donde dormimos no han sido caros, pero comer nos ha parecido carísimo.

Itinerario en 13 días:

  1. San Francisco
  2. Yosemite
  3. Parque Nacional de Secuoyas
  4. Death Valley
  5. Las Vegas
  6. Bryce Canyon
  7. Antelope Canyon
  8. Grand Canyon
  9. San Diego
  10. Santa Mónica
  11. Santa Bárbara
  12. Los Ángeles

Día 1: Madrid – San Francisco

Este viaje empieza cuando, en la cena de Nochebuena empiezas a beber vino, comes, te lías con la familia y de repente, te das cuenta que en dos horas deberías estar yéndote al aeropuerto para coger un vuelo a San Francisco.

A las 4 de la madrugada del 25 de diciembre nos dirigíamos al aeropuerto para coger un vuelo a Amsterdam. El vuelo salió en hora, el avión iba medio vacío, pero nosotros no sabíamos ni quiénes éramos. 

Al llegar a Amsterdam, teníamos dos horas de espera hasta el próximo vuelo a San Francisco. En el aeropuerto de Amsterdam hay varios puntos de información (sobre todo de KLM) que te ayudan a encontrar la puerta del avión.

El segundo avión también salió en hora. Íbamos bastante más apretados que en el primer vuelo. Nos dieron de comer, la comida estaba bastante bien conseguida. Intentamos dormir y algo conseguimos, pero, según pasan las horas te das cuenta, que tu culo y tu espalda desaparecen y que lo único que necesitas es andar. Casi 11 h de vuelo más tarde, aterrizamos en San Francisco. La cola de pasaporte fue rápido. Para ir a nuestro hostal, Hi San Francisco City Center, teníamos que coger el BART, la línea amarilla hasta Civic Center y andar 10 minutos. El ticket del BART cuesta 10$ (8,95€). La máquina no nos aceptaba las tarjetas, así que fuimos a un ATM a sacar dinero. Finalmente, nos montamos en el tren. En unos 20 minutos habíamos llegado a nuestra parada.

Aquí empezó lo bueno. Nos habían dicho que el barrio era de gente drogadicta, pero desde luego, no esperábamos lo que vimos. Creo que no he visto un panorama así en la vida. El cielo estaba gris, y todo el mundo que había en la calle iba muy mal. Sentí como se me revolvía el estómago, parecía que estaba en una película, nunca había visto nada igual. No sentí miedo, pero fui todo el trayecto con mal cuerpo.

Por fin llegamos al hostal, hicimos el check-in, dejamos las cosas, nos duchamos y salimos a andar. Después de tantas horas, el cuerpo nos pedía movernos. Salimos por la puerta y nos dirigimos a China Town, el panorama cambiaba para bien.

Después, llegamos a Little Italy y de ahí a Lomboard Street. Estaba llena de gente, pero nos gustó mucho verla. Tras subidas y bajadas y los gemelos hinchados, llegamos a Fisherman’s Wharf. Nos encantó! La calle está llena de tiendas y hay un ambientazo increíble!! Llegamos hasta el pier 39 a ver a los leones marinos, son monísimos.

Subimos calle arriba hacia Little Italy para cenar, al ser 25 por la noche estaba todo cerrado. Dimos con uno, Calzone’s. Cenamos ahí, una pizza, pasta, pan de ajo y dos cervezas, estaba todo muy bueno pero fue algo caro. Nos costó 73$ (65,33€). Dada la belleza y seguridad de nuestro barrio, decidimos cogernos un uber al hostal que nos costó 9,64$ (8,63€).

Día 2: San Francisco

Hoy ha sido un día maravilloso y, todo empezó, cuando nos desvelamos a las 4:00 h y decidimos ir a ver el amanecer a Twin Peaks. Nos pusimos la alarma a las 6:00 h y nos volvimos a dormir. 

A las 6:00 h nos despertamos, nos arreglamos, bajamos abajo a por un té y un café y pedimos el uber para ir a Twin Peaks. nos costó 11,58$ (10,36€). Cuando llegamos estuvimos con la boca abierta un buen rato. Eso era increíble. El color del cielo, el color del mar, las luces de la ciudad, ver el transcurso de los colores. Era todo precioso, es algo que recomiendo sin dudarlo. 

Después de un buen rato viendo el amanecer y, cómo nos esperaba un día de sol, pedimos otro uber. Esta vez pedimos que nos llevase a desayunar a una cafetería en Castro, Verve Coffee Roasters. El sitio estaba muy bien puesto. Nos pedimos dos cafés, una galleta y dos tostadas contundentes. Nos costó 29$ (25,96€). Recomiendo el sitio, estaba todo buenisimo y el desayuno era contundente.

Al terminar, nos dirigimos al parque Misión Dolores. El cielo estaba totalmente azul, la luz que había era preciosa, y hacía que las calles tuviesen aún más encanto. Llegamos al parque, es precioso. Está todo el mundo con sus perros, haciendo deporte y paseando. Las casas que lo rodean son preciosas y lo único que quieres, es estar en en una de esas casas mirando desde el ventanal. 

Nos dirigimos a la casa de Tom y Jerry. En ese momento, es cuando empiezas a subir y tus gemelos y piernas entran en calor. Llegamos a la casa de Tom y Jerry. Es la casa de unos señores que la tienen decorada con muchísimos peluches. Es muy curioso de ver y, además, el camino hasta ahí y, las casas que hay merecen la pena. Una vez llegamos hasta ahí, volvimos a bajar. 

En la bajada dimos con una cafetería super bonita a la que le daba el sol de lleno. Eran las 9:30 h, así que, decidimos parar a tomar un café. La cafetería se llama Le Marais Bakery. Nos pedimos dos cafés que nos costaron 7,69$ (6,88€). 

Nos sentó fenomenal el café al sol, estaba muy bueno, y el tiempo, y el momento acompañaban. Seguimos andando dirección Market Street. Andamos por Market Street hasta Castro Street. Vimos The Castro Theatre y pasamos por The Rainbow Honor Walk. El distrito de Castro nos tenía enamorados. Las casas, sus ventanales, los jardines, cada una de ellas era única y con algo especial.

Nos fuimos de Castro encantados y con tristeza porque nos habríamos quedado ahí. Nos dirigimos a Ashbury Heights, un barrio de casas preciosas. Al lado de éste, está Haight Ashbury, el antiguo barrio hippie. El barrio es muy residencial, salvo la calle principal que está llena de comercios. Desde tiendas de segunda mano, pasando por restaurantes, hasta tiendas donde venden marihuana. 

Después de recorrernos toda la calle y entrar en alguna que otra tienda, paramos a comer en Magnolia Brewing Haight. Pedimos queso fundido de entrante, dos hamburguesas con extras y dos cervezas artesanas. Estaba todo muy bueno y pudimos comer en la terraza, al sol y en manga corta! Nos costó 73,41$ (65,7€). 

De ahí, nos fuimos hacia Painted Ladies. En mi opinión son muy bonitas, pero no tienen nada que envidiar las casas por las que habíamos pasado esa mañana, tenían mucho más encanto y no están llenas de gente para sacar una foto. 

Cuando terminamos de ver las Painted Ladies, nos dirigimos calle abajo por Steiner Street. Llegamos al barrio Japonés, todo era como Japón! hasta el supermercado. Seguimos andando hacia Polk Gulch y empezamos a andar por Polk Street direccion Fisherman Wharf. La calle mola un montón, está llena de comercios, cada uno de ellos diferentes. Nos paramos a tomar un café en un sitio que nos gustó mucho, Moka Coffee. Nos pedimos dos cafés que nos costaron 8,45$ (7,56€). 

Seguimos andando dirección Pier 33 para la excursión de Alcatraz. A la altura de Lomboard Street, giramos hacia la derecha para volver a pasar por ella. Petada de gente. Bajamos hasta Fisherman Wharf y andamos por la calle hasta el Pier 33. Esperábamos que al salir de Alcatraz nos apeteciera ir a tomar algo por ahí…pero no.

Fuimos con la compañía Alcatraz Cruises.Hicimos el tour nocturno y nos costó 47,30$ (42,33€). Desde mi punto de vista, para lo que era, una auténtica salvajada que si lo llego a saber, no lo hago. Nos montamos en el barco, seríamos unas 100 personas. Tardas 20 minutos en llegar. Una vez te bajas te cuentan algo de la historia hasta que llegas arriba. A mí me pareció un rollo, tenía frío y lo que me estaban contando me importaba poco. Al llegar arriba te dan una audio guía y te va explicando todo. El frío y el cansancio se apoderaron de mí..yo ya no podía más. A las 18:40 h salía un ferry de vuelta del que no nos informaron. Llegamos justo a esa hora y preguntamos que cuando salía el ferry y ya no nos daba tiempo a cogerlo. Teníamos que esperar una hora más. Me empecé a encontrar mejor, pero estaba cansada. Al final llegamos a tierra, cogimos un Uber que nos costó 12,95$ (11,59€) y llegamos al hostal. Había sido un día INCREÍBLE.

Día 3: San Francisco – Yosemite

Ver en el mapa el trayecto: San Francisco – Yosemite

Nos levantamos a las 5:30 h, yo ya estaba nerviosa por el día que nos esperaba :). Salimos del hostal sobre las 6:15 h. Nos dirigimos al aeropuerto a recoger el coche de alquiler. 

Fuimos para allá en Uber, nos costaba 29$ (25,99€) y el metro 20$ (17,92€), consideramos que merecía la pena.  Alquilamos el coche con Alamo. Hicimos el papeleo y nos fuimos dirección Sausalito, pasando por Golden Gate. Moló un montón, es inmenso!.

Llegamos a Sausalito, increíble, unas casas impresionantes y el pueblecito está super bien puesto. Dimos un paseo y nos paramos a desayunar en Sausalito Bakery & Cafe. Nos pedimos una tortilla con bacon y queso, un bagel con queso, una cookie gigante y cafés. Nos costó 22,16$ (19,86€).

Nos dimos una vuelta y volvimos al coche rumbo Yosemite Valley. Nos esperaban 4 h de camino. Pasamos por paisajes super bonitos y diferentes. Primero, por ciudades como Oakland, luego pasamos por prados verdes con ranchos hasta que nos adentramos por las montañas y llegamos a Yosemite.

Cogimos la entrada para todos los parques nacionales, 80$ (71,69€). El parque estaba precioso, nevado, con una luz preciosa que atravesaba los árboles. Entiendo, que en verano y en otoño tiene que estar muy bonito pero, en invierno tiene su encanto. Pasamos por unas cascadas y nos bajamos a hacer fotos. Fuimos parando en los puntos que más nos gustaban. Finalmente, a las 14:00h, llegamos a Yosemite Village. Hay autobuses que te llevan a los diferentes puntos donde empezar las rutas. Nosotros elegimos Mirror Lake, parada #17. Era cortita y para el tiempo que teníamos estaba bien. 

La ruta es muy bonita, creo que son unos 2 km. La puedes hacer por la parte de asfalto o meterte por el otro lado del río e ir por camino natural. Al llegar al final de la ruta está el lago, donde se refleja Half Dome. 

Yo estaba feliz, después de cuatro horas en coche, estiraba las piernas y respiraba un aire que me llenaba por dentro. Volvimos y esperamos al autobús que nos llevaba de vuelta, iba llenísimo, se volvía todo el mundo. 

Llegamos al parking, y cogimos el coche dirección Fresno. En el camino, de repente se empezó a poner el cielo rojizo, miramos a un lado y teníamos ante nosotros uno de los atardeceres más bonitos que habíamos visto nunca. Paramos el coche y simplemente nos quedamos mirando la belleza que teníamos ante nosotros. Cuando se fue el sol, seguimos nuestro camino.

Una hora más tarde, llegamos a nuestro airbnb de Fresno. Melanie, la propietaria de la casa era encantadora. La casa era preciosa, estaban todos los detalles cuidados que te hacían sentir como en tu casa. Cogimos el coche y fuimos a cenar a Garden Village. Elegimos el asiático Wassabi, estaba suuuper bueno y muy buena cantidad. Nos costó 65,05$ (58,29€). Al terminar nos fuimos directos a la cama, estábamos muertos. Habíamos tenido otro día increíble!

Ver trayecto Yosemite – Fresno

Día 4: Fresno – Parque Nacional de Secuoyas – Ridgecrest

Ver trayecto Fresno – Grant Grove (Parque Nacional de Secuoyas)

Dormimos hasta las 7:00 h, una maravilla. Nos duchamos y nos fuimos a desayunar a Fresno Breakfast House. Nos pedimos de todo, dos platazos de huevos con tomate, queso, pan, patatas y de postre un crepe de banana. Nos costó todo 48,27$ (43,22€). 

Al terminar, nos montamos en el coche y nos dirigimos al Parque Nacional de Secuoyas. Entramos por la parte de Kings Canyon. Puse en el maps, Grant Grove. Al llegar, tienes que pasar el mismo control que en Yosemite. Si pagaste el día anterior la entrada para todos los parques nacionales, sólo tendrás que enseñar la tarjeta. 

Al entrar, hay dos desviaciones, una hacia la izquierda y otra hacia la derecha. Primero, fuimos a la izquierda a comprar agua en el pueblecito. Volvimos por el mismo camino y cogimos la de la derecha. Es una carretera única que baja hasta la salida del parque y no hay pérdida.

El paisaje era increíble, estábamos felices. Todo estaba nevado y la luz del sol que entraba entre los pinos, hacía el paisaje mágico. Fuimos parando en todos los puntos en los que nos apetecía parar. 

Llegamos al museo del Giant Forest. Desde ahí teníamos la opción de hacer la ruta al Moro Rock o esperar el autobús para que nos llevase al General Sherman. En verano puedes ir con tu coche a todos los puntos que quieras. En invierno, por la nieve, la mayoría de cosas están cerradas, eso sí, merece la pena. 

Decidimos hacer la ruta del Moro Rock y descartar General Sherman. Había una cola enorme, y ya veíamos que iba a estar plagado de turistas haciendo la foto. Empezamos la ruta, increíble. Todo nevado, la luz del sol que entraba entre los pinos era preciosa, y sólo, muy de vez en cuando, nos cruzábamos con alguien. Disfrutamos muchísimo el paseo. Llegamos hasta Moro Rock, pero no subimos las escaleras porque tenían hielo y no nos lo recomendaron. Las vistas eran preciosas.

A la vuelta nos montamos en el coche rumbo Ridgecrest. Era donde teníamos el motel de esa noche y teníamos unas 3 h de camino. Al rato, paramos en el Subway de Bakersfield. Nos pedimos unos bocadillos y nos los comimos en el coche. Costaron 27,49$ (24,61€). Seguimos el camino, ya era de noche y empezaba nuestro cansancio. Empezó carretera de curvas y montañas otra vez. Necesitábamos llegar al motel. Hora y media más tarde llegamos, Oyo Hotel Europa Ridgecrest. Típico motel de carretera en la ciudad de Ridgecrest. Ducha y a dormir, mañana nos esperaba Death Valley y el día de hoy había sido una pasada.

Ver Trayecto Parque Nacional de Secuoyas – Ridgecrest

Día 5: Ridgecrest – Death Valley – Las Vegas

Ver Trayecto Ridgecrest – Death Valley – Las Vegas

A las 5:00 h abrimos los ojos, y dijimos…¿y si nos vamos ya?. Total, el motel no era una pasada y, ¿si veíamos el amanecer en Death Valley?. Sonaba mucho mejor, y además, queríamos llegar medio pronto a Las Vegas para aprovecharlo. 

Nos preparamos y fuimos al Starbucks a coger algo para desayunar. Nos pedimos dos cafés con chocolate, un bocadillo cada uno y agua. Nos costó 23,48$ (21,13€). Empezamos el camino dirección Death Valley, con la primera parada Mesquite Flat Sand Dunes. El camino hasta llegar fue una pasada. 

Primero pasamos por un pueblo super industrial que impactaba bastante. No entendía muy bien por qué la gente vivía exactamente al lado de todas las fábricas. Seguimos y empezamos a estar rodeados de montañas nevadas, empezó a amanecer. La carretera era eterna, como en las películas, sólo se veían montañas. Subimos de altitud para cruzar una montaña y entramos en Death Valley.

Death Valley también es un parque nacional, si has cogido el pase anual para todos los parques de Estados Unidos, ya tenéis la entrada, si no, tendréis que sacar el pase para el coche. 

Justo antes de las dunas hay una gasolinera, con una tiendecita y unas casitas donde te puedes quedar a dormir o acampar. Echamos gasolina, 35,56$ (32€) y fuimos a las dunas. Las dunas no me parecieron nada del otro mundo. En España he visto dunas que en mi opinión, son más bonitas y, me parece, que el paisaje que te rodea impresiona mucho más que eso. 

Continuamos por la carretera hasta Furnace Creek. Ahí, tenéis otra gasolinera, restaurante, podéis solicitar información del parque y que os den un mapa con las cosas que podéis visitar. 

Nos dirigimos hacia Badwater Basin. El camino es una pasada, el paisaje parece de mentira. Al llegar, aparcas el coche y hay que andar unos 15 min. Nos encantó. Al ser invierno había un poco de agua y se reflejaban todas las montañas nevadas.

Después fuimos a Artist Drive. A mi no me encantó como lo otro, pero es muy bonito. Desde mi punto de vista, todo el trayecto con el coche es fascinante, no hace falta que sea un punto bonito que te marcan en el mapa. Al salir de la carretera, fuimos a Zabriskie point. Aparcas el coche, subes una cuestecita y alucinante. Es como el Desierto de Bárdenas en España pero a lo grande. Nos encantó.

Ese era el último punto que íbamos a ver en Death Valley, así que, nos dirigimos a la salida. Nos apetecía un café y vimos unas casas en medio de la nada. Todo estaba como abandonado, pero había una cafetería y un motel, Amargosa Opera House and Hotel. Paramos a por dos cafés y un wrap de pollo. Estaba buenísimo, recomiendo que si estáis por ahí, paréis. Tanto el pueblo como la cafetería merecen la pena. Los dos cafés, dos aguas y el wrap de pollo nos costó 27,31$ (24,57€).

Nos fuimos hacia Las Vegas, tardamos 2h y 20 min. Teníamos la reserva en el Hotel Paris Al llegar dejamos el coche en el parking del hotel, cuesta 15$ (13,5€) el día. Fuimos a hacer el check in pero no se podía hacer hasta las 16:00 h. Tienes la opción de pagar 15$ (13,5€) y hacer el check in antes. Yo necesitaba una ducha para quitarme el cansancio y el viaje de encima. Pedimos hacer el check in antes pero nuestra habitación no estaba disponible. Dejamos las maletas al botones y salimos a dar una vuelta. 

Fuimos por la calle principal dirección Hotel Venetian, callejeamos, nos metimos a ver cosas y dimos la vuelta. Como quedaban como 20 min para el check in, nos tomamos una cerveza al lado del hotel, Beer Park. Nos costaron 21,36$ (19,22€). Por fin, hicimos el check in. Para hacerlo, necesitan una tarjeta de débito/crédito (sólo leen la banda magnética), te cobran el parking y las tasas del hotel 41$ (36,89€) (una gracia que no te esperas). 

Subimos a la habitación y estaba bastante bien. Llamamos para que nos diesen la maleta y por fin me di una ducha :).

Salimos a la calle, y fuimos al Hotel Venetian, es flipante, tiene los canales y un centro comercial gigante dentro. Salimos y fuimos a cenar a Chayo, un mexicano bastante bueno. Nos pedimos una jarra de margarita y dos platos con bastante cantidad. Todo nos costó 95,43$ (85,57€). 

Salimos y seguimos andando por la calle principal. Estábamos que no nos lo creíamos. Creo que todo el mundo tiene una imagen de Las Vegas pero hasta que no estás ahí, no te lo crees. Los hoteles son gigantes, todo está lleno de luces, hay muchísima gente, tienen de todo.

Fuimos al Bellagio a jugar. Sacamos 60$ (53,99€) y fuimos a la ruleta. Gané 180$ y me entró un subidón. Ahora entiendo porque la gente se engancha. Decidimos coger el dinero e irnos a disfrutar de una margarita.La margarita resultó en una estafa porque nos costaron 39,63$ (35,66€) dos margaritas.

Mientras nos tomábamos la margarita, decidimos casarnos. Es algo que ya habíamos pensado, pero en ese momento nos pusimos a ver cómo se hacía. Lo primero es sacarse la licencia por el County Clerk. Os dejo el enlace donde podéis hacer la inscripción online. Buscamos un sitio para casarnos y decidimos A Little White Chapel, reservamos lo más barato que era el Drive Thru, 95$ (85,48€). Nos fuimos a un centro comercial a por unos anillos cutres y a dormir. Nos lo habíamos pasado increíble!!

Día 6: Las Vegas – Bryce Canyon

Ver Trayecto Las Vegas – Bryce Canyon

Hoy no madrugamos! Nos levantamos a las 9:00 h y bajamos a desayunar el Buffet del hotel, se llama The Village. Cuesta 26,65$ (24€) por persona. Tienen de todo. Nos pedimos una tortilla que estaba buenísima, un crepe con nutella y plátano, fruta y algo de bollería. 

Subimos a recoger y nos fuimos al County Clerk para la licencia. Abren todos los días de 8:00 h a 00:00 h. Había cola, pero iba bastante rápido. Te piden el pasaporte, miran los datos que has completado on line, pagas 77$ (69,34€) y listo!

Nos fuimos al Starbucks de al lado a por dos cafés y agua, nos costó 10,76$ (9,69€). Ya estábamos listos para la ceremonia. Fuimos a “A Little White Chapel”, preguntamos si nos podíamos casar antes de la cita (la teníamos a las 14:00 h y eran las 13:00 h). Nos dijeron que no había problema. Pagamos la mitad que faltaba y al cadillac rosa. 

Montados en la parte de detrás del cadillac, el pastor dando la ceremonia, nosotros muertos de risa, entre otras cosas, porque Juan era “Guan”.  Nos casamos!!!! Ya éramos marido y mujer. Nos hicieron alguna que otra fotito, y le dimos 40$ (36,02€) de propina al pastor (es obligatorio darle propina y el mínimo es 40$).

Nos subimos al coche, y a por nuestro siguiente destino! Teníamos reservada una cabaña en un rancho de un pueblo cerca de Bryce Canyon. Se llama Sevier River Ranch & Cattle.

Tardamos casi cuatro horas en llegar. El trayecto fue precioso. Empezó en desierto y poco a poco iban apareciendo montañas rojizas, marrones, de película del oeste. Ya casi llegando, empezaba la nieve y los bosques, de verdad no puedo expresar con palabras la belleza del paisaje. Íbamos subiendo la montaña y miramos a la izquierda y el sol se estaba poniendo entre las montañas nevadas. El cielo rojo, la montaña y los árboles nevados acompañados de nubes bajas que le daban aún más encanto. 

Cuando se fue el sol, seguimos el camino. Todo era precioso, no había nada. Te ibas encontrando por el camino casas impresionantes de madera con ventanales gigantes.

Llegamos al pueblo donde estaba el rancho, tiene cuatro calles. El rancho está a un km del pueblo. Es precioso, la cabaña es increible, super acogedora, con un ventanal gigante. Fuimos al pueblo para cenar y todo cerrado. Debe ser que en invierno no hay un alma. Volvimos a la cabaña y a dormir. Cada día que pasa en este viaje es maravilloso.

En mitad de la noche, me desperté. Miré por el ventanal, y parecía que era un cuadro. Avisé a J para que mirase por la ventana. El cielo estaba plagado de estrellas.

Día 7: Bryce Canyon – Antelope Canyon – Grand Canyon

Ver Trayecto airb&b – Sunrise Point Bryce Canyon

Nos levantamos a las 6:00 h para ver el amanecer en Sunrise Point de Bryce Canyon. En el camino, vimos un hotel con una cafetería abierta, Cowboy’s Buffet and steak room. Llevábamos desde el desayuno de Las Vegas sin comer, así que decidimos parar a desayunar. El desayuno era buffet, yo me pasé como siempre. Huevos duros, pan, bagel con queso crema, café, huevos revueltos…Nos costaron los dos desayunos 28,35$ (25,49€). 

Cogimos el coche para Sunrise Point, a los 15 min llegamos. Salimos del coche y, madre mía que frío, -18 grados. Todo nevado, era precioso. Entraba toda la luz del sol y se reflejaba en el cañón, pero mis manos habían desaparecido. A los 15 min de estar ahí, nos volvimos al coche. Vimos una tienda y nos bajamos a comprar unos guantes. Nos costaron 41,15$ (36,99€). 

Fuimos hacia el Sunset point para hacer una ruta andando, Queens Garden Trail o Navajo Loop Trail. Pues nada, ninguna de las dos. Hacía un frío de morirse y yo cada vez que andaba arriesgaba mi vida, el hielo resbalaba un montón. Estuvimos un rato disfrutando el paisaje, es una pasada. Nos montamos en el coche y nos fuimos para Antelope Canyon.

Ver Trayecto Bryce Canyon – Antelope Canyon

El camino en coche es increible. Cañones rojizos entre los árboles nevados. De vez en cuando, se ven ranchos y pueblos de 10 casas. A mitad de camino paramos a por un café, Thunderbird Restaurant. Nos costaron los dos cafés 5,48$ (4,93€). 

Seguimos el camino, cada vez nos alejábamos más de la nieve y entrábamos en paisaje de desierto, paisaje de cowboys. Al llegar a Page, paramos a comer en Dam Bar Blue Bud, justo al lado de la compañía de los tours de Antelope Canyon. Nos pedimos unos fingers de pollo, dos filetes de carne y un postre. Nos pedimos dos cervezas que el camarero nos recomendó. Estaba todo buenísimo. Nos costó todo 102,09$ (91,78€). 

Echamos gasolina antes del tour para ir directos cuando terminase y no perder tiempo para la vuelta, 30,32$ (27,26€). Fuimos a hacer el check in del tour de Antelope Canyon. Lo hicimos con la compañía Antelope Canyon Tours

Nosotros teníamos el tour a las 15:00 h porque cuando lo fui a reservar ya no quedaban más plazas. Lo suyo es que reservéis el tour cuando el sol se encuentra justo arriba y, depende de la estación en la que vayáis será una hora u otra. Nosotros al ir en invierno, las 15:00 h se veía ya muy oscuro. Anochece a las 17:20 h. 

En el 4×4 van unas 15 personas, y eran 4 coches para esta compañía y otros muchos de otras compañías. A este cañón no puedes entrar por tu cuenta porque la gente lo estaba maltratando y decidieron hacer tours guiados para conservarlos. 

El tour dura una hora, te explican cómo se formó, las tribus que vivían ahí, las temperaturas, cómo afectaba el clima, etc. El guía nos contó que él prefería los tours en invierno porque en verano hay tanta gente que eso parece un zoo.

Nos gustó muchísimo, las paredes son super suaves, los colores y las formación de arena son brutales. Volvimos al coche y rumbo a nuestra siguiente casita, para esta noche habíamos cogido un tipi en medio de un rancho cerca del Gran Cañón. 

Ver Trayecto Antelope Canyon – Tusayan

Justo pillamos la carretera anocheciendo, pero no te aburres. Los colores del cielo y la luz son tan bonitos que vas disfrutando todo el camino. Luego anochece y hay algún que otro pesado en la carretera, pero todo se pasa con un poco de música y una buena conversación.

A las 3 horas, habíamos llegado a nuestro destino. Paramos a echar gasolina y a comprar leña 35,39$ (36,82€). Paramos a cenar en Grand Canyon Inn, tenían pizza, hamburguesa, sándwiches y cerveza muy rica. Pedimos una pizza, fingers de pollo, dos cervezas artesanas y dos cervezas para llevar. Nos costó 40,96$ (36,82€).

Cogimos el coche y fuimos en busca de nuestro hogar de esa noche, The Grand Nomad. Nos tuvimos que meter por una carretera de tierra y 15 minutos después, encontramos nuestro tipi. Otra vez un frío horrible. En la tienda no había calefacción, había una estufa portátil de propano, que no calentaba nada. Por un momento pensé: 1. Dormir en el coche o bien, 2. Irme a un motel a dormir. Volví a pensar y dije, que va, es Noche Vieja!! enciende el fuego, pon los cinco edredones en la cama y listo.

Preparamos el fuego, empezó a dar mucho calor, nos bebimos las cerveza y estuvimos disfrutando de la noche. El cielo es increible, parece de mentira. Cuando terminamos las cervezas nos metimos dentro de la tienda. A la cama directos, teníamos que crear un espacio de calor. Al ratito, ya estaba todo caliente. Nos quedamos dormidos al instante. Como a las 6:00 h me medio desperté, si sacaba la manita a tocar el edredón por fuera había escarcha y si apoyaba mi cabeza en otro sitio de la almohada había escarcha. Volví a cerrar los ojos para seguir durmiendo.

Día 8: Grand Canyon- Las Vegas- San Diego

A las 7:00 h sonó la alarma, recogimos y preparamos otro fuego para ver el amanecer. El cielo se empezó a teñir de rosa y, desde luego, había merecido pasar la noche ahí. De todas maneras, os recomiendo quedaros en el tipi en primavera, verano y otoño. En invierno se llegan a poner a -20 grados o, como pasamos nosotros la mañana, a -9 grados. No hay baño. Hay un baño portable y la ducha es outdoor ducha, que obviamente ni nos planteamos. Estuvimos sin ducharnos hasta llegar a San Diego. Por un día no pasa nada, pero entiendo que puede haber gente muy friolera que prefiere estar caliente en una habitación con baño.

Fuimos a desayunar al pueblo Tusayan, que es de donde salen los helicópteros. Primero paramos a desayunar en Plaza Bonita. Al entrar, vimos que servían buffet y era todo demasiada comida. Nos fuimos al starbucks a comer algo rápido. Dos cafés calentitos, un bagel y un muffin. A las 8:35 h teníamos que hacer el check in en la oficina de helicópteros, Papillon.

Después del check in, teníamos que ver un video de seguridad, y al helicóptero. Yo estaba cagada por mi miedo a las alturas y en un principio, no lo quería hacer. Una vez te montas y te ves ahí arriba ante algo tan bonito, sólo puedes flipar. No tengo palabras para describir lo impresionante que es. La cantidad de tierra ante ti, formada por los años de manera natural. Parece de mentira. El viaje dura media hora. Es increible, lo recomiendo 100%. 

Nos montamos en el coche dirección aeropuerto de Las Vegas. Los paisajes son una pasada. De vez en cuando vas viendo pueblos, bastante descuidados y con muy pocas casas. En este viaje hay mucho contraste de paisajes y de pueblos. A las casi dos horas llegamos a Kingman y paramos a comer en Mr D’z Route 66 Diner. El restaurante era super guay! La decoración molaba un montón y la comida estaba buenísima! Nos costaron dos hamburguesas y unos sticks de mozzarella 35,11$ ( 31,56€). De postre, fuimos al Dunkin Donuts a por unos cafés y unos donuts, nos costaron 12,63$ (11,35€). Echamos gasolina 35,29$ (31,73€) y seguimos nuestro camino al aeropuerto. Nos quedaba menos de hora y media. 

Al llegar al aeropuerto, echamos gasolina para dejar el depósito lleno 20,37$ (18,31€). La devolución del coche es rapidísima. Dejas el coche en el parking, viene un chico, mira todo en dos minutos y te vas. Nos despedíamos de la «primera» parte del viaje.

Coges un shuttle gratuito que te lleva a la terminal. En nuestro caso, que volábamos con Frontier Airlines, cogimos el número 3. 

Como se nos olvidó hacer el check in online, y pensábamos que podíamos hacerlo el mismo día del vuelo, nos cerraron la posibilidad de hacer el check in online y tuvimos que ir a hacer el check in físicamente. Pensábamos que íbamos a estar ahí media hora pero igual, en dos minutos ya teníamos todo hecho. Pasamos seguridad y fuimos a nuestro área de embarcar. Había que coger un tren pero todo fue muy rápido y cómodo. Llegamos a la zona y me pedí una cerveza hasta que embarcamos. La cerveza me costó 10,80$ (9,71€), una gracia, menos mal que me sentó bien.

El avión salió en hora y el vuelo duraba más o menos una horita. Menos mal, porque menudas turbulencias. Al llegar, cogimos el shuttle que tienen para la empresa de alquiler de coches. Está todo muy bien indicado y el servicio es muy rápido. Hicimos el papeleo (aseguraros de llevar tarjeta de crédito). Nosotros no llevamos, y se supone que con el vuelo de vuelta te dejan alquilar el coche, pero el chico nos dijo que iba a hacer la vista gorda porque no dejan alquilar sin ella. 

Nos tocó un camaro descapotable negro. Arrancamos y para casa. El airbnb está fenomenal!! Todo super limpio y super bien puesto. Nos dimos la ducha caliente que tanto necesitábamos. Qué maravilla, cómo la disfrutamos. Parecía que no nos habíamos duchado en meses. Nos vestimos y salimos a cenar a Alexander’s, un italiano cerca de casa que nos habían recomendado. Se tarda 10 minutos andando desde la casa. Llegamos al sitio y era precioso! además había ambientazo. En la terraza tenían música y gente bailando y bebiendo, y dentro del restaurante varios grupos cenando. Pedimos lasaña y mac&cheese. Estaba todo INCREÍBLE. Creo que de las mejores veces que hemos comido en este viaje. También nos pedimos dos cervezas artesanas de San Diego que estaban muy buenas. La cena nos costó 54,22$ (48,74€). Volvimos a casa y a dormir. Habíamos tenido una entrada de año maravillosa, llena de contrastes. Necesitábamos descansar.

Día 9: San Diego

El día de hoy se resume en 20 km con un final que me costó mis piernas. Todo empezó, cuando nos despertamos a las 7:00 h y fuimos a desayunar a Val’s Coffe Corner en Ocean Beach. Cogimos un uber desde casa que nos costó 19,63$ (17,61€). El sitio era muy bonito, una caravana con una terracita. Las chicas que te atienden son encantadoras y el desayuno estaba buenísimo. Pedimos dos açai bowls bastante contundentes y dos cafés. El desayuno nos costó 28,6$ (25,65€). 

Hubo otros sitios para desayunar que también me gustaron mucho, aunque al final me decantara por el otro. Jungle Java, Breakfast Republic, OB Surf Lodge, OB Beans Coffee Roasters

De ahí, nos fuimos andando a la playa de perros, y pasamos a Ocean Beach. Paseamos por toda la playa y nos metimos por Newport Ave. La calle está llena de cafeterías, restaurantes y tiendas de surf. Nos encantó Ocean Beach. Hace buen tiempo, las casas son preciosas y básicamente se respira buen rollo. 

Cuando estuvimos un rato callejeando, nos dirigimos a Old Town. Teníamos una hora andando, pero hacía muy buen día y nos apetecía andar. El paseo fue muy bonito. Aaunque hay algún punto muerto que es sin más, mereció la pena. 

Llegamos a Old Town y bueno, a mi no me encantó. Es un sitio lleno de tiendas y restaurantes mexicanas y está lleno de turistas. Nada nos llamó la atención. 

Al rato, seguimos a nuestro próximo destino que era Little Italy. Teníamos otra hora andando y lo mismo, muchos puntos muertos. La verdad es que había puntos que no merecían la pena, pero no sabría decir cómo lo habría hecho mejor. Creo que haber cogido uber no me habría gustado nada, y andando por lo menos vas viendo todo en detenimiento.

Llegamos a Little Italy, teníamos hambre y ganas de una cerveza al sol. Entras a Little Italy, y son todos restaurantes italianos y tiendecitas italianas. Paramos en una cervecería, Bolt Brewery Downtown. Nos pedimos dos cervezas artesanas que nos costaron 15,24$ (13,67€). 

Seguimos un pelín más adelante y paramos a comer en Barbusa. La comida estaba bastante sin más, le faltaba mucho sabor. Yo no os lo recomiendo. Por lo menos no nos salió muy caro, 38,41$ (34,45€). Si seguís andando por esa calle, está lleno de restaurantes italianos con terracitas que tienen muy buena pinta. Terminamos de comer y nos fuimos calle abajo por Downtown dirección Gaslamp Quarter. 

La verdad que como ciudad, no me tenía nada enamorada. Sus calles no me transmitían lo mismo que San Francisco. Empecé a decaer de cansancio en picado y empezaba a refrescar un poquito. Paramos a por un café en Coava Coffee. Estaban bastante buenos. Nos costaron 8,99$ (8,06€). Seguimos andando hacia Gaslamp Quarter. A mi, Gaslamp Quarter me gustó algo más, los edificios me parecían más bonitos y estaba bastante ambientado con tiendas y bares. 

Al final de Gaslamp está el puerto. Queríamos ir a Coronado Island para ver el atardecer desde Coronado Beach. Cruzamos el Centro de Convenciones y dónde está el restaurante Joe’s Crab Shack se coge el ferry. Ida y vuelta cuesta 10$ (8,97€).

El ferry tarda 10 minutos en llegar a Coronado Island. Al lado del puerto está lleno de tiendecitas, todo bastante turístico. Para ir hacia Coronado Beach hay que ir todo recto por Orange street y pasar 10 calles perpendiculares. Orange street tiene tiendas, restaurantes y casas. La isla es super residencial, llena de casitas preciosas. El atardecer en Coronado Beach es increíblemente bonito. Aunque, después de los atardeceres tan bonitos que hemos tenido en este viaje, no impresionaba tanto. Pero, desde luego que te dejaba sin palabras. 

Nos pedimos una cerveza en un bar en la playa que pertenecía al hotel. Aquí viene el navajazo, 12$ (10,76€) la cerveza. Pero bueno, había que disfrutarla. El sitio era precioso, los colores también y después de 20 km andando sentaba de maravilla.

Cuando terminamos, y ya había anochecido, pedimos un uber porque yo ya no podía más. El uber costó 15$ (13,45€) y nos llevó directos a casa. Yo estaba agotada y necesitaba descansar. De San Diego, tengo que decir que Ocean Beach me ha fascinado el buen rollo que transmite y lo bonito y agradable que es. Pero tengo que decir, que San Diego como ciudad no me ha transmitido lo mismo que San Francisco.

Día 10: San Diego – Santa Mónica

A las 5:00 h sonó el despertador. Habíamos hablado con Invictus Crossfit para ir a entrenar a las 6:00 h. Llegamos al box, registramos nuestros datos y pagamos. El drop in son 25$ (22,53€). El box es muy grande. Tienen una parte de open box (los que hacen drop in no pueden hacer open box) y otra donde se desarrollan las clases. El coach era super amable y estuvo atento en todo momento. Hicimos el wod, nos sentó muy bien movernos después de todos estos días sin entrenar!.

El box cuenta con todas las facilidades, disponen de variedad de material y cantidad suficiente. Los baños están super limpios y bien equipados. Te proporcionan toallas y jabón. Al terminar compramos unas camisetas para el recuerdo y nos fuimos al coche dirección Pacific Beach.

Pasamos por Pacific Beach con el coche y paramos en un punto para ver la playa. Era bonita, pero en cuanto al buen ambiente y el buen royo nos gustó más Ocean Beach. Fuimos a desayunar a La Jolla, Brick & Belle Cafe. El sitio era muy bonito y el desayuno estaba buenísimo. Tienen de todo, desde dulce, açai y sandwiches. Nos pedimos un scone de chocolate, un bagel de queso con aguacate y un sandwich de pollo. De beber nos pedimos dos cafés. Nos costó todo 26,98$ (24,32€). 

De ahí nos fuimos a La Jolla Cove, aparcamos el coche y nos bajamos a ver. De repente vi dos leones marinos en el agua y me emocioné muchísimo. Corrimos a acercarnos y había como 30 leones marinos tirados al sol. Eran como mis perras. Monísimos. Estaban tan agusto tomando el sol, dormiditos, algunos haciendo la cucharita con otros. Otro estaba medio muerto al sol de lo agusto que estaba, que solo se movía cada diez minutos para estirarse. Me podría haber tirado ahí mirándolos horas y horas. Pero, desgraciadamente, nos teníamos que ir. 

Cogimos la carretera de la playa dirección Laguna Beach. Tenéis que ir por la carretera que esté pegada a la costa: N Torrey Pines Rd, Camino del Mar. El pueblecito del Mar es precioso. Todos los pueblos son surferos. Seguís por Hwy 101. Pasáis por Encinitas, es precioso también. Llegáis a Carlsbad, aquí nosotros nos paramos a dar una vuelta y a tomar un café en Park 101 Carlsbad. Nos quedamos en la parte de fuera, que tenían una mesa de madera que daba como a la ventanilla de la cafetería. Dos cafés con hielos nos costaron 10,11$ (9,11€).

Seguimos nuestro camino hacia Laguna Beach. Hacía un día maravilloso, el sol entraba por el descapotable y simplemente íbamos disfrutando del paisaje y del paseo. Aparcamos en Laguna Beach. Había bastante gente pero conseguimos encontrar un sitio. Dimos una vuelta, bajamos a la playa y finalmente, decidimos comer en Nick’s Laguna Beach. Nos pedimos dos platos y dos cervezas. La cantidad era muy buena y estaba todo bastante rico. Nos costó 74,18$ (66,86€).

Nos montamos en el coche destino Santa Mónica, pasando por Newport Beach y Long Beach. No paramos en ningún otro sitio, queríamos llegar antes de que anocheciera a Santa Mónica y en el coche íbamos disfrutando. Justo antes de anochecer dejamos el coche en un parking de la playa de Santa Mónica que costaba 1$- 1h y fuimos andando hasta el pier. Vimos el atardecer que, no fue tan bonito como todos los que habíamos visto.

Volvimos al coche y fuimos a buscar un bar para tomarnos algo. Paramos en The Upper West, que pillaba cerquita de casa del primo de J. El sitio tenía muy buena pinta, pero también pinta de caro. Pedimos un vino y una cerveza. Nos costó 12,27$ (11,06€). Llegamos a casa del primo de J que estaba al lado del último vino. Nos duchamos, descansamos un rato y nos fuimos a cenar a un Japonés cerca de casa. En el restaurante pides diferentes tipos de carne y te las haces tu en un fuego que hay en la mesa. La carne estaba muy rica. Al terminar nos fuimos a dormir, estábamos muertos.

Día 11: Santa Bárbara – Beverly Hills – Santa Mónica

Nos levantamos a las 7:00 h, nos preparamos y salimos con el coche dirección Santa Bárbara. Habíamos mirado un sitio para desayunar en Malibú, Malibu Farm Cafe. El sitio está en el pier y es muy bonito. Nos pedimos dos cafés, un yogur con granola y fruta, un sándwich y una galleta. Estaba todo muy bueno, pero este sitio es muy caro. Nos costó 51,33$ (46,20€). 

Nos volvimos a montar en el coche para seguir con nuestra ruta. Fuimos por la carretera pegada a la costa, Pacific Highway. Es todo como en las películas. Callejeamos un poco para ver las casas, hay algunas preciosas. Llegamos a Ventura. Yo me estaba quedando dormida, así que decidimos parar a tomar un café. Paramos en Harvest Cafe, el sitio es super bonito y todo tenía super buena pinta. Nos pedimos un café, un smoothie y una galleta. Nos costó 19,89$ (17,90€).

Seguimos hacia Santa Bárbara. Al llegar, dejamos el coche cerca del centro y paseamos por sus calles. Me pareció un sitio precioso. Todas las casas eran como antiguas super bonitas, muy diferentes a lo que habíamos visto. Todo muy tranquilo y con muy buen ambiente. En los edificios hay tiendas que no te esperas, diría que es como antiguo con tiendas modernas dentro. Recomiendo a todos que os hagáis el camino hasta Santa Bárbara. 

Nosotros por un momento lo dudamos, porque no nos queríamos meter tanta paliza. Pero merece mucho la pena y al final el viaje en coche no es tanto. Sobre las 13:00 h estábamos para montarnos en el coche y volver a Santa Mónica. 

Decidimos ir a Beverly Hills. Nos dirigimos a Rodeo Drive. Dejamos el coche en un parking (hay varios parking para dejar el coche). Entramos por Santa Mónica Blvd y a la altura de Rodeo Drive hay uno. Paseamos por Rodeo Drive. 

La verdad, es que no soy muy fan a las tiendas que hay pero merece la pena ir a verlas. Las tienen preciosas, las fachadas de las tiendas son únicas, cada una de ellas tiene su esencia. Subimos por Beverly Drive y en una perpendicular nos metimos hacia Canon Drive.

Paseamos por Canon Drive hasta que dimos con una pizzería muy pequeña pero con muy buena pinta.  Mulberry Street Pizzería. Típico sitio pequeño que vende trozos de pizza con muy buena pinta. Es muy barato, está muy bueno y tienen variedad de comida. Nos costaron dos trozos de pizza y un agua 12,5$ (11,25€) (por fin algo barato!!). 

Nos montamos en el coche y callejeamos por las calles de Beverly Hills para ver las casas. Fuimos por el otro lado de Santa Mónica Blvd. Merece la pena. Las calles son super bonitas, con todos los jardines cuidados y hay casas muy bonitas y otras que, no tanto.

Seguimos dirección Melrose Street. Nos hicimos toda la calle en coche e íbamos parando donde nos apetecía. La calle está llena de comercios y restaurantes. Nosotros paramos a tomar un café, V cafe Los Angeles en un sitio que por fuera no era muy bonito pero el café estaba delicioso y no era nada caro. Nos costaron 7,86$ (7,07€). 

Cuando terminamos por Melrose Street nos fuimos a Downtown Santa Monica. Dejamos el coche en un parking, situado en la 4th con Arizona Ave. Andamos por todas las calles del downtown. Broadway, Santa Mónica, sus perpendiculares y fuimos hasta el pier. No llegamos a bajar hasta el pier porque estaba llenísimo de gente.

Las calles tenían muchísimo ambiente y estaban muy bonitas con todas las luces de navidad. Además, había bares y restaurantes donde poder tomar algo o cenar. Después de nuestra vuelta andando paramos a cenar en 1212 Santa Mónica. El sitio estaba bueno, tampoco era lo mejor del mundo pero estaba bien. Había música, una zona de bar y bastante ambiente. Nos pedimos dos cervezas, dos platos para compartir y un postre. Nos costó 99,47$ (89,52€). Volvimos al parking, las 3-4 horas que estuvimos nos costaron 8,61$ (7,75€). Fuimos directos a la cama, estábamos muertos. 

Día 12: Los Ángeles

Hoy no nos pusimos hora para despertarnos. Sobre las 8:00 h salimos de casa dirección Hollywood. Fuimos a desayunar a Rise N Grind.Estaba bastante bueno, pero tampoco de los mejores a los que hemos ido. Para variar, pedimos bastante desayuno y nos costó 29,04$ (26,33€). 

Salimos a andar por Hollywood Blvd viendo todas las estrellas del paseo de la fama. Vimos el Dolby Theater, no nos pareció nada del otro mundo y también vimos Grauman’s Chinese Theatre. Éste último sí que nos gustó más porque tiene en el suelo las firmas de los famosos escritas y hay algunas de hace mucho tiempo.

Cuando terminamos la calle, nos metimos por la paralela de abajo. Al ver que eran casas y no había mucho, salvo que a unos les habían reventado el cristal de su coche con un martillo, volvimos a Hollywood Blvd. 

Terminamos el paseo y paramos en una cafetería, The Coffee Bean & Tea Leaf para tomar algo fresquito. Nos pedimos dos tés con hielo que nos costaron 6,23$ (5,65€). Llegamos al coche y nos fuimos hacia el Observatorio Griffith.

Si tienes tiempo, puedes dejar el coche abajo y subir andando, y si no puedes subir con el coche hasta arriba y una vez arriba tienes varias opciones de ruta. Si aparcas arriba el parking son 10$ (9,15€). 

Fuimos hasta el observatorio, se veían todas las vistas de la ciudad super bien y las letras de Hollywood. Como tampoco nos hacía especial ilusión ir hasta las letras e íbamos pillados de tiempo, nos fuimos a casa a por la camiseta de los lakers y a comer al In n Out. Nos pedimos dos hamburguesas, patatas y bebidas y nos costaron 13,99$ (12,68€).

Nos fuimos directos a downtown. El partido de los Lakers empezaba a las 19:00 h y queríamos ver un poco el centro primero. Llegamos a Downtown y entramos por Fashion District. Todo era decadente. Muchísima gente viviendo en la calle, la mayoría de ellos enfermos mentales. Parece mentira que haya tantísima gente en la calle. Y que algo que se considera el centro de la ciudad esté tan descuidado.

Aparcamos el coche cerca de The Last Book Store. Merece la pena ir! es enorme y luego encima hay puestos de artistas que venden sus obras.

De ahí nos fuimos andando a Grand Central Market. Está muy guay, os recomiendo ir allí a comer, cenar o tomar algo. Nosotros nos paramos a tomar un café en G&B Coffee. Nos pedimos dos cafés y una galleta por 13,84$ (12,55€).

Enfrente del mercado hay un mini teleférico que te sube a la calle de arriba donde está Walt Disney Concert Hall y el Museo MOCA de arte moderno. Nos subimos en el mini teleférico, cuesta 1$. Luego nos dimos cuenta que justo al lado tienes las escaleras. Pero bueno, ahí nos subimos. 

Fuimos al Walt Disney Concert Hall de Frank Gehry y nos fuimos andando hacia el OUE Skyspace Los Ángeles. Ya era casi el atardecer, entramos y había bastante cola para coger las entradas. Al final las sacamos online más rápido. Cogimos la entrada normal que cuesta 25$ por persona 52,34$ (47,45€) en total. Arriba nos pedimos una margarita para compartir que nos costó 13,09$ (11,87€).

Tienen las alas para hacerse la foto. Nosotros pillamos un rinconcito perfecto en el suelo para ver el atardecer. Tenía al lado as dos empresas de mi vida, en la que he trabajado y en la que trabajo actualmente, una maravilla para ver el atardecer. 

Cuando se fue el sol, seguimos disfrutando un rato y nos fuimos a por el coche para dejarlo cerca del Staples Center. Lo dejamos en un parking en Olympic Blvd (También se puede dejar en 11th Street) con Hope Street. Te cuesta 10$ (9,12€) todo el tiempo que quieras. Nosotros llegamos entre las 17:30 h y las 18:00 h y justo empezaba a llegar mucha gente. Nos fuimos a tomar una cerveza a Tom’s Watch Bar. Nos pedimos una Modelo por 9,38$ (8,5€). Después a la cola y al partido. 

Dentro, nos compramos dos cervezas por 28,68$ (26€). Empezó el partido!! que pasada, me encantó, estaba como una niña pequeña. Teníamos los asientos super cerca, se escuchaba a los jugadores hablar. Fue una experiencia increíble! En el descanso salimos a por una pizza y dos cervezas que nos costaron 41$ (37,18€). El partido se puso empatado pero el el último cuarto ganaron los Lakers! Me encantó. 

Os recomiendo a todos ir si tenéis la oportunidad, es una experiencia super chula. Cuando salimos fuera había unos chicos bailando y nos quedamos a verles un rato. Cuando terminaron, nos fuimos al coche y a dormir. 

Día 13: Los Ángeles – Madrid

Nos levantamos a las 7:15 h. Habíamos reservado una clase de yoga en la tienda de Alo Yoga de Beverly Hills. La clase suelta cuesta 25$ (22,81€). La clase nos gustó bastante, la profesora era un encanto.

Al terminar, nos pedimos dos cafés en la cafetería de la tienda. Nos costaron 7,04$ (6,38€). Salimos, y de camino al coche vimos una cafetería que nos gustó mucho y nos paramos a desayunar algo, Croft Alley Beverly Hills. Nos pedimos un waffle maravilloso y dos zumos de naranja. Nos costó todo 26,44$ (23,97€). 

Cogimos el coche, que lo habíamos dejado en el mismo parking del otro día y nos fuimos hacia Venice Beach. Dejamos el coche al principio de la playa. Nos dimos un paseo largo y volvimos a por el coche para llevarlo a la zona del Recreation Center. 

Hacía un día increíble para estar en la playa tirado y bañarse. Desgraciadamente, teníamos super poco tiempo y nos teníamos que ir pronto. Os recomiendo a todos ir para Venice Beach. Está muy guay, el skate park, la gente haciendo deporte, hay mucho ambiente. Comimos unas hamburguesas y cerveza en Larry’s Venice Beach por 73,66$ (66,78€). 

Al terminar, nos fuimos para casa. Recogimos, nos pegamos una ducha rápida y a dejar el coche. Al igual que en Las Vegas, dejar el coche es super rápido y luego tienes el shuttle que te deja en la terminal que necesites. Nos bajamos, pasamos seguridad, nos pillamos un café en el Starbucks y al avión. 10 h de vuelo y estábamos en Amsterdam. El vuelo se me pasó rapidísimo. 

Había terminado uno de los mejores viajes que he hecho en mi vida. Viaje que os recomiendo a todos y cada uno de vosotros.

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